Los templos más lindos de Cundinamarca

Colombia es un país que conserva las creencias católicas y reconoce su patrocinio al Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María


En Semana Santa, los colombianos acostumbran a participar de las celebraciones religiosas desde el Miércoles de Ceniza -que inicia la cuaresma y recuerda todo el proceso de Jesús de Nazaret para caminar hacía la eternidad entregando su vida por los pecadores del mundo entero- hasta el Domingo de Resurrección -momento en que Cristo triunfa sobre la muerte y nos abre las puertas del Cielo-.

Si usted es de quienes ama viajar, cree en Dios y cree que cada iglesia pisada es la cuna de la bendición para peticiones, no puede perderse el recorrido por los templos más hermosos del departamento de Cundinamarca.  

Imagen de AFP


1. Capilla de Santa Bárbara en Tabio, Cundinamarca

A pesar de que este municipio tiene una iglesia principal llamado Templo Concepcionista, sede principal de la Parroquia Inmaculada Concepción, la capilla Santa Bárbara mantiene su legado, ya que es la cuna de varias ceremonias religiosas; además luego de cuatro siglos ha conservado su arquitectura con piedras firmes, puertas talladas en madera y un balcón con cinco barrotes.   
 
Su infraestructura es considerada una joya y fue construida por los jesuitas como un monumento artístico y cultural de la época que hasta los años 1800 era el lugar de encuentro principal para los feligreses tabiunos, aun así, la provincia Sabana Centro considera esta capilla como una locación ideal para fotos tipo clásicas y/o de la realeza.  

Capilla Santa Bárbara en Tabio
Imagen tomada de tripadvisor.com

2. Catedral del Inmaculado Corazón de María 

Este monumento consagrado al Inmaculado Corazón de María es la sede principal de la Diócesis de Girardot y está ubicado en la ciudad de Girardot en la provincia del Alto Magdalena.

La Iglesia Católica lo abrió al público en 1978; se trata de una construcción inspirada en los diseños egipcios modernos y levantada con una excelente ventilación que permite el ingreso masivo de feligreses, a pesar de la alta temperatura que vive esta localidad. Esta capilla está ubicada en toda la mitad del pueblo donde instituciones y personas organizan diferentes eventos artísticos para los turistas.

Imagen de Camilo Serrati


3. Iglesia de Nuestra Señora de Fátima Tocancipá, Cundinamarca 

En Colombia muchas personas tributan a la Virgen María, venerándola como prueba de agradecimiento y admiración, por ello, hay parroquias que encomiendan sus territorios a la fuente de oración y madre del Creador, en este caso la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima es un territorio reconocido por su fuerte arraigo religioso desde la prehistoria.  

La Iglesia Católica inauguró este templo gracias al trabajo de los Heraldos del Evangelio y reconocidos como los caballeros de la virgen en el año 1593. Fue una de las primeras iglesias de la provincia de Sabana Centro.

Es importante rescatar que los españoles enseñaron a los muiscas de este territorio a venerar a María, en su advocación de la Virgen del Milagro, así que ellos adornaron su imagen con una corona de oro y esmeraldas incrustadas. Hoy esta imagen está puesta en su altar y combina con el diseño gótico de este templo tocancipeño.

Tocancipá cuenta con 2 parroquias: Nuestra Señora del Tránsito y Juan Pablo II, y el templo Nuestra Señora de Fátima forma parte de la primera.

Iglesia Nuestra Señora de Fátima tomada por caballerosdelavirgen.org
Iglesia Nuestra Señora de Fátima tomada por caballerosdelavirgen.org

4. Catedral de Sal Zipaquirá, Cundinamarca 

Este icónico lugar está catalogado por el documental 'Maravillas de Colombia' de Señal Colombia y Discovery Channel como la tercera maravilla de país del tricolor y por ello, es un espacio que acoge a millones de turistas que visitan la mina de sal que contiene en sus profundidades un espejo de agua y unas figuras religiosas talladas en roca. 

Este escenario forma parte de las antiguas galerías cavadas por indígenas muiscas; para esta edificación se extrajeron 250 mil toneladas de roca sal, por ello se reconoce a nivel mundial como la mayor reserva de este mineral. 

Los devotos podrán apreciar los túneles con estaciones del viacrucis, asimismo, hay tres naves: La del nacimiento y bautizo, la vida y la muerte y la resurrección de Cristo; cada una con su propio altar. 

Para la cultura muisca, la sal era un elemento muy de su economía porque basaba y movía su comercio y por eso su capital económica se ubicaba en la actual Zipaquirá. Los muiscas no eran mineros de vocación y extraían el mineral del agua que brotaba de la superficie, pero fueron los españoles los encargados de remover la capa vegetal y adentrarse en lo profundo de la montaña. De esta explotación minera surgiría la advocación mariana que originó la construcción de una primera catedral por iniciativa de Luis Ángel Arango, inaugurada en 1954 y abierta al público hasta 1992, según una nota de Alejandro Pesca publicada en https://www.radionacional.co/

Esta catedral forma parte de la Diócesis de Zipaquirá y se ubica en la capital de la provincia Sabana Centro conocida como Zipaquirá.

Interior de la Catedral de Sal tomado por Inaldo Pérez del Sistema Integrado Digital
Interior de la Catedral de Sal tomado por Inaldo Pérez del Sistema Integrado Digital

5. Templo Franciscano y Salesiano en San Francisco

Este centro de oración es la sede principal de la parroquia San Francisco de Sales ubicada en el municipio de San Francisco en la provincia del Gualivá. Esta iglesia es pintoresca y 
colorida con mantos de colores que adornan su techo y que son simbolizados como colores de la paz y la reconciliación.

Quienes han tenido la oportunidad de conocer la parroquia y el pueblo, mencionan que esta localidad está rodeada de gente y ambiente amables por su calidez humana, su paisaje y su temperatura templada. 

Templo Franciscano y Salesiano tomado por tripadvisor.com
Templo Franciscano y Salesiano tomado por tripadvisor.com

6. Basílica del Divino Salvador, Santo Cristo y San Diego de Ubaté 

La primera piedra de este centro oratorio se puso en 1927 y duró cerca de 11 años para brillar en el centro del municipio de Ubaté, Cundinamarca es reconocida a nivel nacional por ser la basílica menor.  

La obra fue terminada por un arquitecto francés que le dio detalles concebidos en estilo gótico flamígero y detalles barrocos. Es decir que la arquitectura tiene acabados en punta fina con una fachada de color blanca. La comunidad ayudó a adornar el interior de este sagrado recinto ya que les atribuyen milagros a las plegarias dirigidas al divino salvador. 

Basílica del Divino Salvador, Santo Cristo y San Diego tomadas por tripadvisor.co y distimap.com

7. Templo Inmaculado en Simijaca



Información redactada con base en la nota publicada en https://www.alertabogota.com/noticias/local/las-iglesias-mas-bonitas-de-cundinamarca

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